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jueves, 5 de diciembre de 2013

La vainilla, el tesoro mexicano



Leyenda de la vainilla. Fuente: wikimedia
Leyenda de la vainilla. Fuente: Wikiemedia
"Cuenta la leyenda que en los tiempos del rey totonaca Teniztli tercero, una de sus esposas tuvo una hija que por su belleza fue llamada Tzacopontziza, "Lucero del Alba". Ésta se enamoró de un joven príncipe llamado Zkatan-oxga "Joven Venado", a pesar de que tal sacrilegio estaba penado con la muerte. Un día, cuando la joven salió del templo a buscar tortillas para ofrecer a la diosa, huyó con el joven príncipe hacia la montaña, donde se les apareció un monstruo que los envolvió en llamas obligándolos a retroceder. A su regreso los sacerdotes los esperaban y sin explicación alguna fueron degollados. 

   En el lugar en que se les sacrificó, la hierba empezó a secarse y brotó un arbusto que se elevó sobre el suelo y al alcanzar su desarrollo total, comenzó a crecer junto a su tallo, una orquídea trepadora. Una mañana, ante el asombro de los sacerdotes, la planta se cubrió de flores y todo el sitio se llenó de exquisitos aromas, y no dudaron en creer que la sangre de los dos príncipes se había transformado en arbusto y orquídea. Su sorpresa fue mayor, cuando las hermosas flores se convirtieron en largos y delgados frutos que al madurar desprendían un dulce y suave perfume. Era la planta de la vainilla. Así, la vanilla fue declarada planta sagrada y se elevó como ofrenda divina en los adoratorios totonacas". (Mundoarcoiris.com)

   Hace unas semanas estuve viendo un documental de TVE, La ruta de las especias que hablaba del azafrán y de la vainilla, y la historia de ésta última me llamó especialmente la atención.

Planta de la vainilla. Fuente: veracruz.gob.mx

   Hoy en día encontramos la vainilla en rama, en polvo o en esencias en casi cualquier supermercado, pero hubo un momento en que ésta fue un gran descubrimiento y únicamente se producía en México. Fueron los españoles del S.XVI, quienes trajeron a Europa esta especia de profundo aroma: Hernán Cortés llegó a Tenochtitlán en 1519 y fue recibido por el emperador Moctezuma Xocoyotzin. En el primer banquete que les fue servido, Bernal Díaz, soldado al mando de Cortés, notó que el emperador disfrutaba una bebida que únicamente era servida a él y a los grandes personajes de la corte. Al preguntarle a un sirviente le dijo que era la bebida de los dioses preparada con Tlilxochitl y Cacahoatl. Moctezuma notó el interés y ordenó que les fuera servida a los españoles, quienes pidieron conocer los exóticos frutos con los que estaba hecha. Grande fue su asombro al saber que esas negras varitas, eran las que le otorgaban a la deliciosa bebida tan sutil perfume. (Mundoarcoiris.com)

Edmond Albius. Fuente: Wikimedia
  Tras este descubrimiento, la vainilla fue exportada al continente europeo, pero durante tres siglos siguió siendo monopolio exclusivo mexicano ya que, por razones desconocidas, la plata de la orquídea no producía vainas en Europa. Resulta que esta planta necesita ser polinizada por una abeja que tan solo habita en esta región del contienente americano para producir vainilla. Fue en 1841 cuando un esclavo de la isla Francesa Bourbon (actualmente Reunión), Edmond Albius, descubrió que se podía realizar dicha polinización manualmente y, por fortuna para los europeos, pero por desgracia para los mexicanos, se consiguió producir la vainilla en el resto del mundo.

   El descubrimiento de Albius permitió la producción masiva de esta planta y también su exportación a todo el mundo pero llevó consigo el fin del monopolio mexicano sobre la vainilla y el olvido del pueblo totonaca. Actualmente la vainilla se cultiva en países como Indonesia, México,Tahití, Uganda, Jamaica, Costa Rica, la India o Madagascar, pero éste último produce alrededor del 60 % de la vainilla del mundo.

   Consumimos la vainilla diariamente en todo tipo de platos y postres, pero apenas la valoramos, y tras ella se esconde una historia verdaderamente apasionante. No sé vosotros, ¡pero yo tengo unas ganas tremendas de hacer un postre con vainilla mexicana!

    Mientras tanto, rescato la receta de batido de vainilla con un toque de canela que subí este verano: ¡rico, dulce y aromático!


 
Fuentes consultadas: documental de TVE, "La ruta de las especias", web del Gobierno de Veracruz, web de la Universidad de Veracruz, Mundoarcoiris.com, Wikipedia.

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